El ciclón Chapala entró a tierra en el sur de la costa de Yemen el 3 de noviembre. Esta poderosa tormenta trajo consigo fuerte lluvia, grandes olas e inundaciones a las zonas costeras, que afectaron a miles de personas.

Según los registros del país, Chapala es la tormenta más fuerte que ha afectado a Yemen desde hace 30 años y es equivalente a un huracán de categoría cuatro en la escala Saffir-Simpson, de la que se espera que cause daños catastróficos.

La tormenta ha sido responsable de tres muertes en la isla de Socotra el 1 de noviembre y ha destruido aproximadamente 400 casas antes de continuar al norte hacia la tierra firme de Yemen.

Chapala entró a tierra en la región de Hadramaut en las primeras horas del 3 de noviembre. Miles de residentes de las zonas en las que se esperaba sufrir la tormenta fueron evacuados, pero debido al actual conflicto civil actualmente existente en Yemen, hay preocupación por las carencias de organización de una reacción adecuada, en algunas zonas que no tienen una autoridad gubernamental clara.

La ciudad de Mukalla sufrió daños en la tormenta y muchas casas y viviendas del paseo marítimo del puerto han sido destruidas. Las calles están inundadas y los residentes se han refugiado de la tormenta en escuelas y hospitales. La ciudad ha perdido el suministro eléctrico y algunos vecinos se han visto forzados a retirarse a lugares más altos para escapar de la inundación.

Además, Yemen no tiene experiencia respecto a las tormentas tropicales, porque no suele sufrirlas. Se prevé que Chapala conlleve lluvias fuertes, que supondrán en un día una cantidad equivalente a lo que el país suele recibir normalmente en un año.

Se espera que las regiones de Shabwah y Hadramaut sufran las peores inundaciones. Se estima que un millón de personas puedan estar afectados por la tormenta en Yemen, mientras que 40.000 han sido evacuados o han perdido sus hogares.

Se espera que las secas zonas altas de la región debiliten rápidamente la tormenta.