Las lluvias torrenciales han causado inundaciones y deslizamientos de tierra en la provincia de Artvin de Turquía el 24 de agosto. Ocho personas han muerto y se ha informado de la desaparición de varias más.

Se ha señalado como las precipitaciones más fuertes en los últimos cincuenta años de la zona. Se estima que en seis horas de lluvia ha caído el equivalente a cuatro meses.

Las inundaciones han dañado viviendas de la zona y los deslizamientos han aplastado varias casas. Algunas viviendas eran particularmente sensibles al desastre al estar situadas en el lechos de arroyos y terrenos montañosos. Además de las inundaciones y los daños en las viviendas, hay carreteras bloqueadas por los escombros o intransitables por las inundaciones, lo que ha cortado el acceso a algunos pueblos remotos de la zona.

Los trabajadores de emergencia comenzaron las operaciones de búsqueda y rescate, y drenaje de las aguas, el 25 de agosto.